LA LEYENDA DEL HILO ROJO
LEYENDA DEL HILO ROJO
Cuenta una antigua leyenda oriental que, en el lado oculto de la Luna ,vive un hombre milenario que ata un hilo rojo en la mano de cada ser humano en el momento de su nacimiento. Este hilo nos conecta con todas aquellas personas con las que estamos destinados a encontrarnos . A lo largo de nuestra vida, habrá momentos en que el hilo pueda tensarse o enredarse, pero nunca se romperá…
El origen de la leyenda es chino: allí cuentan que el Abuelo de la Luna sale cada noche a conocer a los recién nacidos y atarles el hilo rojo que decidirá su destino.
Aunque no habla exactamente de amor -hay variantes sobre padres e hijos adoptados, o sobre amigos incondicionales- en Japón la historia se aplica a los enamorados, y el Hilo Rojo ( ellos le llaman Unmei No Akai Ito) viene a ser como Cupido.
Existe una leyenda al respecto, según la cual hace muchos, muchos años el emperador de Japón era un niño joven e impaciente. Quería conocer cuanto antes a la mujer a la que estaba predestinado, y enterándose de la existencia de una vieja bruja que era capaz de ver los hilos rojos de todas las personas, le mandó llamar y le ordenó que siguiera su hilo hasta el final. La vieja obedeció, y emprendió el camino, seguida del joven emperador. Tras un largo y agotador recorrido, llegaron a un mercado de una ciudad lejana, y la vieja señaló a una campesina con un bebé en brazos. El emperador al ver el resultado enfureció, y empujó a la campesina con fuerza. El bebé cayó al suelo y comenzó a llorar a causa de la herida de su frente.
Pasados unos cuantos años, el emperador buscó esposa aconsejado por su corte, y se le habló de una preciosa joven, hija de un general de su ejército. La mandó llamar, y al retirar el velo que le cubría la cara de la joven, el emperador se quedó fascinado por su belleza, sólo ensombrecida por una pequeña cicatriz en la frente.
Los Japoneses utilizan las pulseras del hilo rojo como símbolo de amor y de amistad.
Es una forma única y original de decirle a las personas que quieres “mi hilo rojo me trajo hasta ti, tu eres mi destino”